En el marco del Proyecto del Colegio Santa Clara, se llevo a cabo la obra más difícil de la restauración del ex Convento: la nave del tejado de la iglesia, que data del siglo XVII y es una de las naves más grandes de Centroamérica.
Los trabajos han ido precedidos de un minucioso análisis del estado de los materiales y de las sustituciones e intervenciones que han tenido lugar a lo largo del tiempo. Mostraba claramente un estado de gran deterioro, no sólo debido a los fenómenos atmosféricos, sino también a la agresión de diversos tipos de parásitos.
El inventario de cada viga o viguetas permitió diferenciar con precisión las intervenciones, que iban desde la restauración de los materiales hasta la sustitución por materiales adecuados y especialmente resistentes.
La sustitución de la estructura por vigas nuevas o reacondicionadas ya se ha completado en todo el tejado, y después se podrá proceder a la impermeabilización y al recubrimiento de tejas.
