Programa de apoyo a la puesta en valor del patrimonio cultural de El Cobre
El “Programa de apoyo a la puesta en valor del patrimonio cultural de El Cobre” propone contribuir a implementar el desarrollo integrado del asentamiento urbano de El Cobre, situado en la inmediata periferia de Santiago de Cuba. El lugar es símbolo de la identidad nacional cubana.
La atención especial que se dedica a este lugar se debe al hecho de que El Cobre hospeda la parte más significativa del patrimonio histórico-cultural y religioso del país.
El Programa se enmarca en el conjunto de acciones operativas para poner en práctica las estrategias de desarrollo del área, adoptadas por el Gobierno de Santiago, cuya implementación está a cargo de la Oficina del Conservador de la Ciudad de Santiago de Cuba (OCC).
En concreto, el Programa, que prevé diferentes fases de intervención, centrandose en la primera de ellas, apunta a apoyar el fortalecimiento del tejido urbano, a efectos de mejorar la calidad de vida social y el empleo de sus habitantes en las cercanias de Plaza Agustín Cebreco, en el Centro Histórico de El Cobre – declarado como Monumento Nacional.
En términos urbanísticos y de construcción, el programa apunta a lograr sus objetivos de mejora de la la calidad de vida y promoción del patrimonio a través de la reforma y la rehabilitación:
- de los inmuebles para viviendas más preciados utilizados por las franjas sociales más desfavorecidas;
- de las estructuras de servicio social;
- urbanística en las inmediatas cercanías de la Plaza principal del Centro Histórico (Plaza Agustín Cebreco).
Por otro lado, se ha dado inicio a las acciones de asistencia técnica especializada para ajustar las técnicas de construcción y restauración y también aquellas relacionadas al relanzamiento social, cultural y productivo del territorio.
De hecho, a nivel social y de generación de empleo, el Programa se propone alcanzar sus objetivos (mejor habitabilidad y valoración del patrimonio) a través de la cooperación técnica y la asistencia formativa y operativa de las propias estructuras de la OCC, pero sobre todo de los trabajadores del sector de la construcción que operan en el territorio y los del sector turístico, de servicios y otros identificados por los beneficiarios, y para apoyar la generación de empleo que el Gobierno Cubano está promoviendo en todo el país.